entrevista al ingeniero civil Yuri Rubio para la Agencia Local Gestora de la Energía de Las Palmas de Gran Canaria
El agua es imprescindible para la vida, de ahí la necesidad de preservarla y darle la importancia social y gubernamental que requiere como bien de primera necesidad para la población. En Canarias nunca ha sido un recurso infinito. La tendencia en el Archipiélago, con la escasez de lluvias y la necesidad de abastecer hasta dos y tres veces la demanda debido al turismo, ha sido la desalación. El ingeniero Yuri Rubio, natural de Tenerife, comenta a la Agencia Local Gestora de la Energía de Las Palmas de Gran Canaria algunas curiosidades sobre el uso del agua en las islas.
“En Canarias la tendencia ha sido apostar por la desalación para mantener la agricultura, las industrias, la vida de los ciudadanos y de los millones de turistas que nos visitaban anualmente”, introduce Rubio.
“La totalidad del agua que se consume en islas como Lanzarote y Fuerteventura procede de la desalación. En Gran Canaria el 86% del agua para consumo humano es desalada. Las más de 45 desaladoras con las que cuenta Gran Canaria están aportando a los sistemas de la isla cerca de 80 hm3 de agua cada año, un volumen considerable”, aporta el ingeniero, que hace un llamamiento a la necesidad del denominado Plan Hidráulico de Canarias, contemplado desde 1990 en la Ley de Aguas de Canarias competencia del gobierno regional, y aún a la espera.
La fuente principal de agua la conforman las aguas de origen subterráneo. Tenerife es la isla con más recursos hídricos, pero a pesar de ello el 47% del consumo de los hogares procede de la desalinización. El proceso mediante el cual se transforma el agua de mar en agua potable se denomina osmosis inversa.
“Desde la realidad de mi isla, Tenerife, el agua potable servida en domicilio se puede consumir perfectamente sin necesidad de ningún tipo de filtrado. No tiene una calidad como la de los domicilios madrileños pero se puede beber”, describe Rubio. Las islas orientales no gozan de la misma suerte y siempre ha sido costumbre consumir y cocinar con agua embotellada. La recomendación del ingeniero para filtrar el agua y poder tomarla para beber es el uso de un bernegal canario. “Cualquier otra recomendación iría en contra de mi cultura tradicional del agua canaria”, significa.
Yuri considera que, siendo nuestro territorio un Archipiélago rodeado de mar, ya es hora de que “se empiece a estudiar muy seriamente las posibilidades que ofrecen las centrales hidráulicas marinas”, teniendo también en cuenta la necesidad de emplazamientos de almacenamiento de esa energía. “No disponemos de corrientes de agua permanentes como los ríos por lo que la opción más factible es intentar generar nuestros propios saltos de agua artificiales”, detalla, refiriéndose a la central hidroeólica Gorona del Viento, en El Hierro.
El ingeniero considera “alentadora” la idea del proyecto Chira-Soria que se sigue impulsando en la isla redonda. E incide en el otro factor clave; el almacenamiento de la energía. “De nada sirve extraer energía si luego no hay lugar para su almacenamiento en grandes cantidades”, insiste.
Cómo mejorar y hacer más eficiente el uso del agua en Canarias
En primer lugar, Yuri Rubio señala la necesidad gubernamental y política de avanzar en la elaboración del Plan Hidráulico de Canarias, recurso que serviría para conocer “realmente de cuánta agua disponemos como conjunto, que siempre será más que como islas individuales”, dice, y para acometer las indicaciones que garanticen el abastecimiento de agua potable para la totalidad de la población. “Sabríamos qué es esencial y qué no, de dónde podemos ahorrar y de dónde no”, describe.
Acabar de una vez por todas con el uso de agua potable para regadío también es una necesidad acuciante a ojos de Rubio: “Debemos dejar de usar agua potable para el riego cuanto antes y destinar más recursos a mejorar los sistemas de saneamiento-reutilización-riego. Es un tema ya no solo de ahorro sino de salubridad de nuestra población y territorio”.
A nivel individual, el ingeniero, amante del agua, dotes que demuestra publicando regularmente en la web especializada en agua Iagua.es , destaca la necesidad de consumir lo más local posible: “Cada producto que nos llevamos a la boca tiene un gasto de agua asociado a su cultivo, fabricación y transporte”.
Además, añade que “las duchas de agua fría” suelen ser rápidas y efectivas, “usas menos agua y mejoras tu circulación sanguínea”. Detalles como poner la lavadora a máxima carga o lavarnos los dientes usando solo un vaso de agua para enjuagarnos también constituyen pequeñas muestras a nivel individual que contribuyen al cuidado del Planeta.
